En nuestra práctica se recomienda que después de la gimnasia nos demos una ducha, preferiblemente de agua a temperatura ambiente o natural, la comúnmente llamada ducha de agua fría.
Los beneficios de la ducha de agua fría son:
- A nivel circulatorio el agua fría, al impactar con el cuerpo, provoca como reacción del mismo una vasoconstricción de afuera hacia dentro, cuya consecuencia es doble. Por una parte, al encontrarse el sistema circulatorio con mayor presión, se fuerza a una gimnasia cardíaca y, por otra parte, a nivel interno se produce un vaciado de la sangre venosa almacenada en los órganos y su sustitución por sangre arterial oxigenada, por lo que se facilita la eliminación de toxinas y productos de desecho del organismo. Al finalizar la ducha y secarnos se produce el efecto contrario. Es decir, una vasodilatación total, que permite al cuerpo relajarse y eliminar tensiones, fundamentalmente, en el nivel muscular. Como consecuencia de este proceso se acelera el metabolismo celular, mejorando la eliminación de tóxicos y detritus del metabolismo, estimula la diuresis
- A nivel de la piel el agua fría produce un cierre de los poros que previamente se habían dilatado con la gimnasia psicofísica, además se produce una absorción de electrones libres del ambiente, lo cual aporta tersura y suavidad a la piel.
- A nivel del sistema nervioso tiene como consecuencia la obtención de un estado mental más sereno y controlable, ideal para la práctica de ásanas y/o relajación que realizaremos a continuación. También a nivel psicológico produce una sensación de placer y bienestar. Asimismo contribuye a despertar los sentidos.
Destacar que la práctica diaria de la ducha de agua fría además de lo indicado estimula la formación de glóbulos blancos y mejora el sistema inmunitario, lo cual previene de catarros y resfriados. Previene la calvicie. Estimula y mejora la calidad en la producción de espermatozoides. También ayuda a combatir la depresión, según un estudio (Discovery News ), ya que puede activar el locus ceruleus, zona del cerebro que es la principal suministradora de noradrenalina , sustancia que puede ayudar a aliviar la depresión. Se cree que es debido a que el número de receptores cutáneos del frío es de 3 a 10 veces superior al de receptores de calor, con lo que la ducha fría sería una especie de "electroshock suave" para el cerebro, activando esa zona y, por tanto, la producción de esa sustancia.
La ducha de agua fría no debe durar más de 30-40 segundos. Para adaptarse de forma gradual se empieza por mojarse las piernas, después los brazos, tronco y finalmente la cabeza.
La ducha de agua fría no debe durar más de 30-40 segundos. Para adaptarse de forma gradual se empieza por mojarse las piernas, después los brazos, tronco y finalmente la cabeza.
